Guía Sibaris

En una limpieza de un vetusto edificio se halló una botella, la cual contiene cerveza que fue hecha hace 140 años. Tal descubrimiento fue examinado por la Universidad Técnica de Múnich y llevado a los laboratorios del Centro de Investigación Weihenstephan para la Calidad de la Cerveza y los Alimentos.

Tal examinación fue conformada por un panel de expertos catadores, así como científicos. Cada uno experimento en su respectivo campo y obtuvieron sorprendentes resultados. Los primeros comprobaron que esta cerveza contiene notas a jerez, oporto y ciruelas entre otros. Esta todavía huele y sabe bien, de acuerdo a las opiniones de estos profesionales.

Los científicos fueron un poco más allá de los sabores y olores, ellos se adentraron en la composición química y ello demostró que la firma de la cerveza histórica es comparable a las etiquetas de hoy, que son elaboradas industrialmente. También hallaron una fuerte oxidación de los componentes del lúpulo.

Luego hicieron una comparación con 400 cervezas modernas, nacionales e importadas, y los investigadores clasificaron la muestra como una lager pálida típica. Todo esto dio como resultado en una base de datos que ahora permite entender la tecnología detrás de un producto.

La investigación de la cerveza histórica permite a los científicos sacar conclusiones sobre los métodos de elaboración de la cerveza de la época. Descubrieron, por ejemplo, que la cerveza se elaboraba mediante un proceso de fermentación inferior y luego se filtraba.

Otro descubrimiento interesante: la cerveza había sido elaborada de acuerdo con la Ley de Pureza, aunque eso no era obligatorio en la región en ese momento. Pero se elaboró ​​de acuerdo con la Ley de Pureza y se correspondía completamente con las características publicadas en ese momento, además del color. La famosa ley de pureza proviene de Baviera, en 1516 se promulgó en Ingolstadt como reglamento estatal. Estipulaba que la cerveza sólo podía constar de agua, malta y lúpulo, añadiendo posteriormente levadura como ingrediente.

Para concluir, este descubrimiento nos indica que la cerveza hallada es de la marca Barre, una cervecería privada que se halla en en Lübbecke en el distrito de Minden-Lübbecke en Renania del Norte-Westfalia. La cerveza se almacenó constantemente a temperatura ambiente y se selló con corcho, alambre y cera.

Una cerveza que demuestra la excelente hechura de los alemanes, donde el tiempo no ha sido factor para que pierda sus excelsas características.

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