Guía Sibaris

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El Arte Barroco en la Gastronomía Poblana

Categoría: Gastronomia Foodie Sibaris Fecha: hace 6 años 20,228

Si hay algo que demuestra que la gastronomía es parte tangible de nuestra cultura son los museos mismos; pero vamos, no entraremos en una cuestión muy seria, al contrario, la comida debe ser un rito para alimentarse y relajarse de la cotidianidad, ser ese momento para Degustar la cocina mexicana.

Retomando el lado cultural, en esto podemos añadir la presencia de extraordinarios restaurantes, lugares que complementan el alimento del espíritu y redondean una experiencia diferente a cualquier otra salida. Y en Puebla no nos quedamos atrás, hay conceptos museísticos diversos, ya que hay con fondos privados y  otros estatales. Y uno de ellos es el majestuoso Museo Internacional del Barroco y vámonos por partes, entrando al detalle gastronómico de estos hermosos lugares.

Para iniciar este Descubrimiento, debemos maravillarnos con el espectacular diseño del Museo Internacional del Barroco, inmaculado edificio, salvaguarda de preciosos tesoros de esa Puebla de antaño, de un periodo en específico y que fortaleció mucho de la identidad de la ciudad y uno de esos elementos es la cocina tal como la conocemos.

Con esta breve introducción podemos decir que esa límpida fachada e interiores,  se ve transportada a la carta del Barroco Restaurante y he ahí su base, una cocina que se regodea con lo virreinal de sus ingredientes, tomando como base a platillos insignes de la gastronomía poblana (sobra decir que también son representantes nacionales). Pero eso no quiere decir que se experimente con los platos y se busque tener nuevas propuestas en presentación y sabores, es así como vemos la aparición de platillos como los esquites negros con maíz Cacahuazintle, tlacoyo de frijol con mole de capulín, mole de quelite o la ensalada de alcachofas y hongos en adobo de chile guajillo.

Los postres no pueden faltar y hay uno, muy significativo, ya que le rinde un sentido homenaje a una parte importante de la zona poblana, Los Fuertes de Loreto y Guadalupe, y así, tal cual se llama un mousse de frutos rojos ahumados con chocolate, menta y raspado de eucalipto.

Pero sabemos que todo esto no puede ser realidad sin la experiencia y visión de sus cocineros y aquí hay un dúo que intercala y propone ideas, además de Compartirse como profesionales y seres humanos. En ese mismo menú hay dos nombres importantes, el primero de ellos es el de Martha Ortiz  Chapa, una de las más reconocidas chefs de nuestro país, con presencia internacional (todo esto gracias a su delicioso Dulce Patria). Ella siempre ha sido una gran impulsora de la cocina mexicana, lo cual a hecho mediante asesorías, creaciones de conceptos gastronómicos y como una reputada escritora (es coautora de 8 libros de comida regional).

Quien le hace, como decimos coloquialmente, “segunda” es un chef que ha ido creciendo y funge como el amable anfitrión de esta hermosa casa y lleva por nombre Alán Sánchez Guzmán, el cual ha sabido respetar las ideas y aportaciones de Martha. En sus propias palabras, nos damos cuenta de su forma de pensar: “nuestro objetivo principal es enaltecer la gastronomía poblana a nivel internacional.”

Terminamos resaltando un interesante concepto, tanto el Museo como el Restaurante, conforman un menú especial y temático para algunas de sus exposiciones temporales, lo cual dota de profundidad y sincretismo a este insigne museo de la ciudad de los ángeles.

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