Guía Sibaris

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Polonia preserva sus bares de leche

Categoría: Gastronomia Sibaris Editorial Fecha: hace 8 años 16,386

Para que no digan que no hay temas y gustos para todos, ahora nos adentraremos al territorio de Europa del Este, a Polonia y es en éste país donde nos abocaremos a hablar de un tema que suena bastante interesante, los Bares de Leche.

Curiosamente hay cerca de 140 de estos establecimientos, a primera vista nos puede parecer un buen número de locales y que están distribuidos por todo el país, pero lógicamente se concentra la mayoría en Varsovia, la capital; pero revisando los anales de la historia, existían más en la era socialista de la nación, como un fomento a cambiar de hábitos y a la vez como un desahogo a las restricciones que vivía la población polaca. La cantidad que había en ese entonces era de 40 mil bares, algo digno de presumir y alabar.

 

Pero entremos en detalle, para empezar el término es bar mieczny, que es ídem del título, y su origen, aparte de las cuestiones políticas (que de ahí parte todo, por dar más trabajo a los que estaban desempleados, es como nacen estos bares), es la escasez de carne que había en esa época, los 80´s, sumando que también se había impuesto una ley marcial a la población. Con todo esto fue una consecuencia razonable que en lugar de ofrecer platos con contenido de proteínas, se dieran alimentos basados en productos lácteos y fue una excelente medida, ya que asentó las bases para que hoy en día exista un tipo de Slow Food en Polonia, aunque su concepto fue pensado de manera diferente, querían hacer una cadena de comida rápida y la transformación sin aparente intención, es la de ser una gastronomía tradicional.

 

El menú que existen en estos bares es muy magro, con una presentación sencilla de tres tiempos y postre, además que la variedad es corta, pero por lo que se dice, efectiva y suculenta. Tomemos, por ejemplo, la Barszcz (borsch), que es una sopa hecha con remolacha roja, caliente, apropiada para días fríos, o en el otro caso, hay Pierogi, empanadas rellenas de carne, con ingredientes de papas, pimienta, cebolla y la carne picada. Son dos de los platillos que están en las cartas de los sitios dedicados a esto, además que son económicos y contienen ese aire de nostalgia, que está atrayendo a las nuevas generaciones de polacos y obviamente, a los turistas que visitan a Polonia.

 

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