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Este es el mejor momento para cenar (y tener una gran digestión)

Categoría: Gastronomia Foodie Sibaris Fecha: hace 4 años 13,787

No es una hora concreta porque el metabolismo no se acelera anticipando el momento de la cena. Modificar la velocidad del metabolismo es algo muy complicado, solo al alcance de personas que practican deporte de alto de nivel. La respuesta es mucho más sencilla de lo que parece: cenar pronto y cenar bien. Diferentes expertos coinciden en recomendar una última comida unas dos o tres horas antes de ir a dormir para que nos dé tiempo a hacer la digestión antes de meternos en la cama, esa es la clave de todo el asunto.

La cronobiología, la ciencia que estudia los ritmos circadianos encargados de regular el "reloj interno" de los seres humanos, defiende que es importante cenar temprano ya que a partir de las 10 de la noche nuestro sistema digestivo empieza a funcionar más lento. Y es que modificar el metabolismo no es para todo el mundo. Solo deportistas que someten sus cuerpos a situaciones extremas como carreras que duran 24 horas, deberían hacerlo e incluso entonces no es recomendable en todos los casos. 

Es conocido que las condiciones de nuestro entorno, como la exposición al frío, pueden cambiar la cantidad de energía que la persona gasta en su metabolismo basal o, incluso, que entrenar bajo ciertas condiciones de ayuno o con menos reservas energéticas puede provocar adaptaciones.

Eso no quiere decir que todo el mundo tenga que entrenar en ayunas. Es más, para gente amateur no es la mejor manera de empezar. Sino que, en una persona ya entrenada, puede ser una opción a entrenar, para que cuando durante la carrera tenga esa carencia de nutrientes para obtener energía rápida, recurra más al depósito graso, que es casi infinito.

Hay otra serie de aspectos que sí que podemos trabajar para que no se ralentice, como por ejemplo, dormir bien. La privación del sueño hace que se ralentice el organismo y no se quemen tantas calorías al día siguiente, advierten los nutricionistas. También señalan a los cambios bruscos en el peso como responsables de las variaciones en la velocidad metabólica. Así que hay que dormir las horas necesarias es fundamental para no engordar. Se recomienda que las horas de sueño coincidan con el máximo de horas de noche por lo que es necesario intentar ajustar las horas de luz a la estación del año y tener en cuenta los cambios de hora.

Un estudio elaborado por el Instituto Salk para los Estudios Biológicos de San Diego (EE.UU.) ha descubierto que lo más recomendable para no aumentar de peso es realizar todas las comidas del día en una franja de 12 horas. Es decir, que si desayunamos a las 8 de la mañana, deberemos cenar a las 8 de la tarde. El problema es que este tipo de horarios no son demasiado compatibles con nuestra cultura mediterránea y la adaptación puede ser un tanto complicada, sobre todo si cenamos con otras personas. En cualquier caso, cuanto antes cenemos mejor y no solo para nuestro peso.

Hay estudios como el realizado por el Instituto Global de Barcelona (ISGlobal) que aseguran que una cena temprana disminuye en un 20% las probabilidades de padecer diferentes enfermedades como el cáncer de próstata o el de mama. Aquí la hora límite para la cena la ponen en las 9 de la noche y vuelven a insistir en que lo mejor es no acostarse hasta dos horas después de haber cenado.

Hay que tomar en cuenta todas estas recomendaciones que hacen los profesionales de la salud para no incrementar el peso y con ello evitamos esa serie de problemas corporales antes descritos. 

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