Guía Sibaris

Dicen que hay de chiles a chiles, sin albur jóvenes, pero es que es así como debe de reconocerse el aporte a la gastronomía nacional y de cómo, aun habiendo sus variedades en otras partes del mundo, influenciamos a muchas otras zonas y/o naciones que se han contagiado por el buen gusto del chile. En nuestro país es religión, es un gusto que viene desde antiguas generaciones y que, afortunadamente, no ha cambiado un ápice. Lo encontramos en varios platillos típicos, como el ingrediente estrella, en otros es un complemento en salsa o por unidad; sea como sea, el chile esta entre nosotros, y uno de esos ejemplares es el chiltepín.

Este es una especie que crece y se da, así tal cual, en la gran mayoría de Latino América, incluyendo las islas del Caribe; pero insistiendo, aunque me llamen villa melón, es en México que más se ha usado, le han encontrado muchas propiedades benéficas, pero más en la cuestión culinaria. Vemos que se utiliza en muchos estados como Oaxaca, Veracruz, Yucatán, Sonora, Sinaloa, Guerrero y varios más, y para fortuna de nosotros, en la Sierra Norte de Puebla, en todas esas comunidades hermosas, ya se ve el chile en los tradicionales mercados, en sus sabrosos caldos y platos que encuentras en los tianguis, esos que se ponen en el fin de semana.

Y es que esas manos mágicas, así de literal y no por elevar, pero es que las cocineras tradicionales que encuentras en esos poblados de Cuetzalan, Zacapoaxtla, Pahuatlán, Zacatlán o Tlatlauquitepec, se afanan por hacer recetas sencillas pero efectivas, y es ahí donde percibes el ingenio y talento de estas mujeres bellas. Ya que saben explotar, todas las características y bondades de este chile. De él, hacen condimentos y salsas, que acompañan de poca a la sopa de hongos, los tayoyos, que son como las gorditas, pero éstos llevan hoja de aguacate y para complementarlos se les agrega la salsa de chiltepín. Y si quieres viajar un poco más y entrar en los bellos bosques de esos poblados, toma tú mochila y viaja a Chiuanime, y en éste lugar, encontraras un plato ancestral, el de frijoles con xocoyote y chiltepín, una verdadera delicia.

En todos esos mencionados lugares, el chiltepín es recolectado de manera orgánica, ya que es común que en la mayoría de las casas, haya un huerto familiar, no ha dejado de ser una herencia de las antiguas civilizaciones nahuas, totonacas o huastecas, y en general de todas las que hay o existieron en nuestro territorio. El chile es cosechado de manera silvestre y que no se halle en un estado de maduración, al contrario, es un chile que se explota joven y después, como muchos de los que hay en nuestra República, se le deja secar al sol y con ello, hay más sabores.

Y también en las otras entidades, tienen sus propias versiones culinarias, los cuales son populares y que nunca deben de faltar en las mesas de los mexicanos, y si no han probado el mondongo, tapixte, el menudo, la sopa de setas, los guisados de quelites y otras recetas que tienen o más bien, tenemos el gusto de conocerlos.

Descubre al rojo, Degusta con las salsas y Comparte las delicias del chile.